A mi madre
Son milagros que yo no entiendo, tus besos tiernos de azafrán, son de lunares negros pintados los abrazos que me das, brillantes aunque esté lloviendo me sujetan, libres como las nubes blancas que se van. Suave se derrama otra caricia, que de entre mis dedos se resbala, como la fresca sonrisa del mar. Vuela bajo …